"Alcohol may be man's worst enemy, but the Bible says love your enemy" Frank Sinatra.

jueves, 22 de octubre de 2015

Seis minutos.

- Tienes seis minutos para decidir qué harás con ese revólver. Apuesto a que estás barajando estas dos posibilidades: dejar el arma en el suelo y salir despacio de la sala, quizá llorando de rabia o impotencia por no haber sido capaz de apretar el gatillo o simplemente puedes hacer todo lo contrario y descargar esas seis balas, llevando el resto de tu vida la carga de haber matado a un hombre desarmado.
- ¡Cállate!

- ¡Oh, vamos! No seas maleducado. Es un gesto muy feo mandar callar a alguien.

- ¡He dicho que te calles!

- Estoy intentando hacer esto menos violento, más atractivo pero no colaboras. En otra situación habría castigado duramente tu comportamiento. Al fin y al cabo, soy de una época en la que el respeto era la seña de identidad de un hombre. Hoy en día los jóvenes solo piensan en hacerse con más y más dinero para gastárselo en putas y alcohol barato.

- Tú me metiste en todo esto. Me engañaste, me vendiste y ahora no tengo nada excepto un revólver en la mano y unas ganas terribles de meterte una bala en la cabeza.

- ¡Jajajaja! Relájate chico. Fuiste tú el que entraste en el juego. Sabías lo que había y aún así decidiste quedarte. Te dolió lo de aquella chica... ¿Tracey? No recuerdo bien su nombre. Era bastante espectacular y te encandiló desde el primer día. Mujeres, chico. Son la perdición de un hombre. Pero bueno, era una simple put-

Uno
Dos
Tres
Cuatro
Cinco
Seis